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domingo, 1 de noviembre de 2015

Sole Giménez pisa Chile después de 23 años

Allá por fines de 1991 o principios de 1992, gracias a un artículo en la Revista Wikén de El Mercurio, la que en ese entonces era mucho mejor que ahora, descubrí al grupo español «Presuntos Implicados», que en ese época estaba promocionando su disco Ser de Agua (1991) y del cual salieron tales hits como Cómo Hemos Cambiado y Llovió, entre otros. Por supuesto, me compré el disco y lo escuché de “pe a pa” mil veces. Me hice adicto al grupo y a la dulce y potente voz de su vocalista Sole Giménez. Como completista que soy, inmediatamente me hice de sus discos anteriores, también excelentes, De Sol a Sol y Alma de Blues, otra obra maestra. Su primer disco Danzad, Danzad Malditos, solo lo pude obtener décadas después.

Bueno de ahí en adelanta compré TODOS los discos de Presuntos y estaba atento a todo lo que salía de ellos, como adicto que era a la dulce voz de la Sole Giménez. Una mujer que transmite una ternura y una dulzura muy especial en sus interpretaciones. Vino la separación de Sole del grupo y como desgraciadamente a esas alturas no se editaban los discos de la Sole en Chile, estuve un poco perdido con su carrera, hasta que gracias a Amazon España y Amazon USA, me compré todos los CD editados por la Sole en solitario y que son una maravilla. Tanto yo como mi mujer somos grandes fanáticos de las canciones e interpretaciones de la Sole, en solitario y con Presuntos. Cabe destacar que Sole es también una gran compositora y compuso varios éxitos de Presuntos.

Toda esta introducción es para contar que el 29 de octubre de 2015, Sole Giménez cantó en Santiago después de 23 años sin pisar Chile (había venido antes con Presuntos, pero no pude asistir a verlos en vivo). Yo tenía muchas expectativas de este Concierto, en el que presentaría su nuevo CD Cómo Hemos Cambiado (2014), una revisión de su carrera, que tuve la suerte de comprar en mayo de este año en Barcelona, cuando andaba de viaje, y fueron ampliamente superadas.

                                                                                                                    Foto: Danilo Alexis Trujillo
El Teatro Nescafé de las Artes estaba abarrotado de gente, incluidos varios miembros de lo que parecía ser su “fan club”. Con mi mujer tuvimos la suerte de comprar una ubicación al centro en la cuarta o quinta fila, así que pudimos verla muy, muy bien. La Sole en vivo es increíble, porque no solo demostró todo su rango y capacidad vocal acompañada solo por un pianista cubano excepcional, Iván Melón Lewis, sino que su comunicación con el público y su calidez, hicieron de esta noche algo memorable. En este punto debo destacar la excelente química y comunicación escénica entre la Sole y su pianista Iván; es un plus que hace que toda su presentación funcione óptimamente. Hay una complicidad y un fiato impresionante.

                                   Foto: Juan Francisco Lizama
La Sole canta como los dioses, es para mí una de las mejores voces de los últimos tiempos y tiene un repertorio excepcional que abarca sus propias composiciones, pop y baladas; boleros; bossa-nova; jazz, etc. Se paseó por canciones clásicas como Aguas de Marzo, La Vie en Rose (canta en Francés perfecto), Fallen (en un perfecto inglés también), La Bohème, etcétera y reinterpretó sus grandes éxitos como Cuando Quiero Sol, Alma de Blues, En la Oscuridad (momento excepcional, con un desgarro que me conmovió hasta lo más profundo), Cómo Hemos Cambiado, etc. Muchas de las canciones las volvió a “armar” en una marcada clave jazzística y sonaron excepcionales. Fui testigo que la Sole Giménez no se limita a cantar tal o cual canción como está grabada en el disco, ella las reinterpreta y las transforma constantemente. Un acierto.

Mención aparte merecen sus interpretaciones de Gracias a la Vida, homenajeando a nuestro país y sobretodo de Te Recuerdo Amanda de Víctor Jara, una de las canciones más bonitas del cancionero chileno, que la cantó con un sentimiento, una emoción y conexión con todos nosotros fuera de serie. Literalmente se me puso la carne de gallina con esa interpretación. Magistral.

Aquí me quero referir al rango de la Sole, que abarca canciones contemporáneas y clásicas de todos los tipos y layas. Canciones como por ejemplo, Un Ramito de Violetas, que no cantó anoche, pero que interpreta en su disco Pequeñas Cosas, la que hizo famosa en mi país Zalo Reyes y que nunca me gustó. Ella transformó esa canción y le dio otro nivel y ahora sí me gusta. La Sole con su voz dulce e innata elegancia interpretativa, eleva todo lo que toca y podría cantar la canción más increíblemente alejada de mi gusto y hacer que me gustara y ese es un MERITO INMENSO. Una intérprete fenomenal.

El público no dejó que la Sole se fuera cuando dio por finalizada la presentación y le pidió a rabiar que volviera y ella tuvo la excelente disposición de seguir cantando otras canciones más.

Asimismo, debo destacar su sencillez y la sobriedad de la puesta en escena. La Sole es una persona muy espontánea y muy natural. Ella es muy dulce, muy elegante, con mucha, mucha clase. Vestida impecablemente, una mujer muy esbelta y atractiva, aparentando muchísimos menos años de los que tiene sin haber acudido a la ayuda del cirujano plástico. Una mujer cien por ciento natural en todo sentido, que se agradece en estos tiempos tan llenos de artificialidad. El diálogo que entabló con nosotros, compartiendo vivencias hizo que viviéramos  un momento muy mágico. Pocas artistas tienen una comunicación tan fluida y natural con el público y tal manejo del escenario, sin haber pisado en más de 20 años este país.

                                                                                          Foto: Juan Francisco Lizama

Por otra parte, y no menos importante, tuvo una gran disposición para recibir al final de su presentación a todos sus admiradores, y los asistentes que quisieron sacarse fotos con ella y pedirle que autografiara su disco. Impecable.

Me gustaría que los medios chilenos hicieran mayor eco de esta importante visita a Chile; ayer cantó Sting en Chile y hoy solo vi cobertura de su concierto y no he encontrado nada de la Sole. Una vergüenza. Ojalá los medios cubran su concierto del Enjoy Viña (30 de octubre) y del Enjoy Santiago (31 de octubre).


Fernando Silva Astorga, Santiago de Chile